Un vídeo está circulando en estos días por Internet. Se trata de una breve intervención que el polifacético artista Prince Rogers Nelson, quien fuera mundialmente conocido como Prince, llevó a cabo en 1999 con motivo de la entrega de los Yahoo Internet Life Awards. Vistas sus declaraciones más de dos décadas después, lo que era una clara advertencia sobre un peligro que entonces y en silencio comenzaba a acechar al ser humano, fue tomada por las mentes programadas de la mayoría como quien regaña de forma condescendiente o medio en broma. Sin embargo, era un aviso de quien ya anticipaba el abuso y adicción a una nueva droga, aparentemente inofensiva.
Pero quizás aquí la clave, más que el qué se dijo y quién lo dijo, sea el dónde lo dijo. Viendo las imágenes, da la sensación de que se lo piensa bastante, duda, sobre si dar ese mensaje y cómo hacerlo, teniendo en cuenta la tribuna pública y el escenario para la ocasión. Hay quien pensará que, teniendo esa opinión, quizás debería haber renunciado al premio, pero el alcance y repercusión de su mensaje no habría sido el mismo y tampoco se hubiera dado ese efecto sorpresa sobre lo que dirá un galardonado justo en el momento de recoger su premio. Y de haberlo rechazado, no podríamos hablar de la relevancia del dónde se producen las declaraciones, en terreno de juego enemigo, el de un importante grupo empresarial de aquella Internet emergente y todavía en pañales... para el público -no para la industria militar-.
¿Se podría interpretar esta intervención como un fallo de la Matrix? Sea como fuere, si quieres salir de ella, empieza a pensar por ti mismo para, de este modo, no vivir pendiente de lo que te digan -ordenen subliminalmente- los falsos "referentes sociales" o "líderes de opinión", pues éstos pueden ser meras correas de transmisión para crear, consolidar o cambiar tu punto de vista respecto a determinados asuntos sobre los que alguien ya ha tomado previamente una decisión planificada.